Conviene empezar definiendo que es el concepto de autopercepción: la autopercepción es la imagen que se hace el individuo de él mismo. El desarrollo de nuestra imagen comienza desde la niñez en el entorno familiar y con las experiencias e información que asimilamos del entorno. El producto de la autopercepción es subjetivo y puede discrepar con la realidad.
Alguno de los factores que influyen en esta autopercepción del individuo, pueden ser las exigencias psicosociales que recibimos, así como los factores sociales y en concreto, es importante el papel que ejerce la escuela, pues es un lugar donde el niño pasa gran parte de su tiempo interaccionando con otros individuos, por lo que la autoimagen puede verse alterada en el momento que los compañeros expresen ideas con las que no estemos conformes. Por ejemplo, en un niño puede verse bien hasta que los compañeros le llaman gordito y comienza a verse así.
Durante el proceso de esta autopercepción, se pueden dar anomalías debido a una insatisfacción personal (descontento con el propio cuerpo...) derivando a un trastorno autoperceptivo que no sólo conlleva a cambios físicos, sino también psíquicos y sociales.
Uno de las trastornos más frecuentes en edades adolescentes, es la anorexia. Las personas que padecen esta enfermedad, tienen una autopercepción equivocada de la realidad, viéndose gordos cuando no lo están.
En mi opinión, los hogares y las escuelas son los factores principales que deben actuar para evitar estos trastornos, fomentando una buena alimentación y actividad física, ayudando y apoyando al niño de manera física y psicológica para que construya así una buena autopercepción de si mismo.
Con la siguiente imagen de una manzana, quiero mostrar lo que les sucede a muchas personas, mientras están prácticamente en los huesos, se ven gordos.
Para finalizar mostrare un pequeño vídeo para obtener más información:
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